En algún punto, es normal que los dueños de cada vehículo deseen hacer cambios pequeños o quizás más grandes, por cuestiones de utilidad, o quizás más apuntando a mejorar la estética del mismo, pero se debe tener cuidado.
La realidad es que no todos los cambios van a requerir de homologación, pero la gran mayoría sí, por ende, es importante conocer cuáles son aquellos que no suponen ningún riesgo de perder la ITV, más si está vigente.
¿Tu coche cuenta con su homologación ITV?
Es bien sabido que la homologación ITV es un requisito fundamental para garantizar la seguridad y la eficiencia de los vehículos en las carreteras.
Por tal razón, los coches deben someterse a inspecciones periódicas de ITV, cuya frecuencia varía según la antigüedad del vehículo.
Esta homologación es esencial para asegurarnos de que nuestros automóviles cumplan con los estándares de seguridad y emisiones requeridos por la ley.
¿Por qué las modificaciones afectan la ITV?
Una pregunta común que surge entre los propietarios de vehículos es si las modificaciones realizadas en sus coches afectarán a la homologación ITV, siendo la respuesta es sí, en muchos casos.
Las modificaciones pueden alterar el funcionamiento y la seguridad del vehículo, lo que hace necesario someterlo a una nueva homologación, incluso si aún no ha alcanzado el período regular de inspección.
Algunas de las modificaciones más usuales que pueden afectar la ITV incluyen cambios en la suspensión, la potencia del motor y otros elementos que influyen en la seguridad y el rendimiento del vehículo. Es importante recordar que cualquier modificación que pueda cambiar las características técnicas y de seguridad del automóvil debe ser informada y, en ocasiones, homologada por las autoridades correspondientes.
¿Todos los cambios requieren de homologación?
No todos los cambios ejecutados en un vehículo requieren una homologación específica, aunque existen modificaciones que pueden procederse sin la necesidad de obtener una homologación especial.
A continuación, se enumeran algunos ejemplos de modificaciones que no requieren homologación al hacerlas:
- Llantas. Cambiar las llantas de tu vehículo por otras de dimensiones similares generalmente no requiere homologación. Sin embargo, es valioso asegurarse de que las nuevas llantas sean compatibles con el tamaño de los neumáticos y no afecten la altura del vehículo, porque quizás sea un problema.
- Alerones. La instalación de alerones suelen ser una modificación estética que no afecta directamente la seguridad o las prestaciones del coche. En la mayoría de los casos, no es necesario homologarlos.
- Escape. Si la modificación del sistema de escape no aumenta significativamente las emisiones o el ruido, es posible que no sea necesario homologarla. Aún sí, es recomendable consultar las regulaciones locales para asegurarse de cumplir con los requisitos.
- Iluminación. Cambiar las luces delanteras o traseras por otras de características similares generalmente no requiere homologación. No obstante, es importante que las nuevas luces cumplan con los estándares de seguridad y visibilidad.
- Interior. Las modificaciones en el interior del vehículo, como la tapicería, los asientos o el equipo de sonido, casi nunca requieren homologación, ya que no afectan la seguridad ni las prestaciones técnicas del coche, por ende, es posible hacerlo.
¡Te ayudamos con cualquier homologación!
En IMD, entendemos la importancia de mantener tu vehículo en cumplimiento con las regulaciones de homologación ITV, por ende nuestro compromiso es ayudarte en todo momento, desde la obtención de las tarjetas ITV necesarias hasta la homologación de modificaciones específicas en tu coche o vehículo en general.
Además, ofrecemos servicios de obtención de depósitos de gasoil homologados y asesoramiento personalizado para garantizar que tu vehículo cumpla con los estándares legales y de seguridad vigentes. Solo confía en nosotros para mantener tu vehículo en perfecto estado y cumpliendo con todas las regulaciones necesarias.